Agua para la vida en la Sierra de los Cuchumatanes
El agua es indispensable para todo: cocinar, lavar, limpiar y, sobre todo, para beber. Sin embargo, en muchas comunidades de Huehuetenango no existen ríos ni pozos, por lo que la única forma de obtener este recurso es aprovechando la lluvia que cae sobre los techos de las viviendas y almacenándola en aljibes.
En la Sierra de los Cuchumatanes esta práctica no es una alternativa, sino la única fuente de agua. Por ello, almacenar agua de lluvia en aljibes es completamente normal y se vuelve esencial mantener estos reservorios en buen estado para conservar este vital líquido en condiciones adecuadas.
Con el apoyo de FUNDEA, seis familias de la agencia de Todos Santos Cuchumatán lograron restaurar, a bajo costo, siete aljibes artesanales, permitiendo almacenar hasta 83 metros cúbicos de agua. Para estas familias, la lluvia continúa siendo una bendición que se utiliza de la mejor manera. Gracias a estos aljibes, ahora cuentan con agua para más tiempo y sin incurrir en gastos adicionales, ya que no necesitan comprarla.
En resumen, mantener los aljibes en óptimas condiciones ayuda a prevenir enfermedades, reduce gastos, garantiza agua para el consumo del hogar y evita el esfuerzo físico que implica trasladarla desde lugares lejanos. Por esta razón, para FUNDEA apoyar este tipo de iniciativas es fundamental, pues contribuye directamente a mejorar la calidad de vida de nuestros clientes y sus familias.
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